Depresión y estado de ánimo
La tristeza es un estado de ánimo común y no patológico. Hablamos de depresión cuando esta tristeza se instaura de una manera mucho más intensa, constante y perdurable, y dificulta la vida de la persona que la sufre. Se caracteriza por una pérdida significativa de deseo. Si tu estado de ánimo se ve afectado de esta forma, podemos ayudarte a ponerlo en palabras y encontrar una salida.
La depresión comporta un estado de tristeza intenso que en algunas ocasiones viene precedido de una pérdida importante (pareja, trabajo, etc.), pero en otras se trata de un estado en el cual la persona afectada ha ido entrando sin que haya un suceso que lo desencadene, ni que pueda dar cuenta de ello.
En cualquiera de los escenarios, es importante hacer una historización del trastorno para ver que dificultades subjetivas y que conflictos psíquicos han llevado a esta situación, y a la vez poder realizar un diagnóstico sintomatológico y estructural preciso para ver de que tipos de patología se trata. Adicionalmente, se valorará la conveniencia de administrar fármacos antidepresivos, siempre sin olvidar que poner a trabajar los recursos de cada paciente para salir de esta crisis de la manera más reforzada posible es algo fundamental en la dirección de la cura.
Preguntas frecuentes
No es tan importante el diagnóstico clínico, si no aquello que tu sientas y cómo este estado llega a afectar las diferentes áreas de tu vida, haciéndote sufrir a tu o a los más cercanos a ti. Ya sea un dolor que no puedes ubicar en el tiempo, una pérdida que no termina de resolverse, o episodios de tristeza muy profundos, nosotros le daremos un lugar y un contorno donde situarlo y contenerlo cuando tu no puedas.
Esto dependerá de cada caso, pero en ocasiones en las que hay una negativa o resistencia, es importante poder hacer una primera entrevista con los familiares o la pareja de la persona afectada, donde enfocaremos el caso y te orientaremos en la mejor manera de trasmitírselo, intentando que puede abrirse a la opción de hacer un tratamiento.
Los antidepresivos -o otros fármacos- no siempre son necesarios, pese a que en función de la gravedad del caso pueden considerarse -el psiquiatra hará una valoración si así lo requiere-. El hecho de poder elaborar aquello que surge en los estados depresivos o melancólicos, permite en varias ocasiones prescindir del uso de fármacos. Independientemente de esto, puedes consultarnos abiertamente sobre esto y tu opinión será siempre capital en la decisión disponer o no de un soporte farmacológico.
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